Publicado 25 octubre 2024. Fuente: Diario Enfermero
POR MARCOS GÓMEZ JIMÉNEZ
Una gran mayoría de los pacientes que ingresan en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) tiene riesgo de desarrollar una lesión por presión (LPP).
Para luchar con mas efectividad contra este tipo de lesiones, un grupo de enfermeras canarias ha creado la “Guías de Cuidados Enfermeros para la Prevención de Lesiones por Presión en Pacientes Ingresados en una Unidad de Cuidados Intensivos”.
“La enfermera de una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) debe detectar en la valoración inicial al ingreso del paciente y cada 24 horas con una de las escalas validadas científicamente para pacientes críticos, que le permita medir el riesgo de lesiones por presión (LPP)”, explica Carmen Arroyo, enfermera, profesora titular de la Universidad de la Laguna y autora principal de las Guías.
Arroyo asegura que, en la UCI del Hospital Universitario de Canarias, las enfermeras y el personal auxiliar de enfermería tienen entre sus objetivos prioritarios mantener el control de la tasa de incidencia de LPP por debajo del 7%.
La primera de las guías recogen los cuidados enfermeros a lo largo de todo el proceso de ingreso y estancia de un paciente en estado crítico independientemente del motivo de ingreso. La segunda está centrada en el paciente cardioquirúrgico desde su ingreso en el hospital para cirugía cardiaca, en el quirófano y en la UCI. Y la tercera guía es de aplicación a pacientes con distrés respiratorio agudo y a pacientes con COVID 19, que precisan posición de decúbito prono.
“La forma de evitar que el paciente pueda presentar una LPP durante su estancia en UCI es a través de la aplicación de medidas adicionales además de las protocolizadas para los pacientes críticos que ingresan en la unidad”, indica Arroyo.
Abordar a pacientes con LPP
“Casi la totalidad de los pacientes ingresados en UCI por su estancia y encamamiento requieren una vigilancia continua para la prevención de LPP”, recuerda la experta.
El paciente en estado critico o que presenta un nivel de gravedad tal amenazante para su vida es propenso a este tipo de lesiones, que no hacen más que complicar las cosas.
Arroyo asegura que la prevención es el mejor cuidado enfermero que se puede dar a estos pacientes. “Si queremos que los cuidados sean excelentes, debemos siempre prevenir que se den estas lesiones”, afirma.
En la guía se hace una diferenciación entre los diferentes tipos de lesiones, como pueden ser las que se dan por presión, por fricción, por cizalla y por humedad.
Además de nombrar que los pacientes que se encuentran postrados en la cama, inmóviles, desnutridos., críticos o con una discapacidad, son quienes pueden sufrir la formación de una LPP, puesto que muchos de ellos pueden tener las capacidades sensoriales afectadas.
Por esto, las guías recomiendan la vigilancia de la piel, la limpieza, los cambios de posición, el control de la humedad y los cuidados continuos.